sábado, 3 de diciembre de 2011

Yo era un amor.

Soy un amor... era un amor.
Me impresionaba mucho, lo veía como la perfección andando, pensé que no solo buscaba su deseo carnal de sexo, pensé que el si creía en la dulzura y en el amor, pero tarde muy tarde me di cuenta que no es así.
Al ver sus bonitos versos me di cuenta que no era dedicados al amor, eran dedicados a un deseo reprimido sexual, disfrazados de palabras de verdaderos amantes.
No sé, pero el ya hizo que desconfiara de los poetas que me rodean, si hay alguien que sea dulce y romántico sin esperar nada a cambio, el mundo se ha salvado.

2 comentarios:

  1. Los "Cogelones" con disfraz de poeta abundan!
    Pero no debes olvidar que la mitad del "AMOR" esta condicionada a la unión de los cuerpos y la otra mitad a la unión de las almas. Ojala te guste la entrada de mi blog que puse como URL. Saludos (@TacosAlCastor o @DarwinVera en Tuiter)

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  2. me cagan los dichos, pero como dicen... "la mula no era arisca..."

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